La historia comenzó cuando Ron Sveden, el hombre en cuestión, no podía respirar y fue trasladado al hospital de su ciudad, en el que le hicieron radiografías que mostraron que su pulmón tenía una mancha.
Al principio los médicos le diagnosticaron un tumor. ¿Pero qué pasó? sólo se trataba de un vegetal germinando en su cuerpo.
Finalmente esa mancha no era tan peligrosa como los profesionales pensaban: “Me dijeron que había una arveja en el pulmón que había brotado y tenía varios centímetros”, declaró el paciente.
Parece que ocurrió lo que comúnmente madres y abuelas llaman "irse por el otro cañito", ya que la arvejita viajó equivocada y desembocó en el pulmón.
